
El deterioro cognitivo es la pérdida de funciones básicas en las personas tales como la memoria, la atención, la velocidad de procesamiento de la información, etc.
De forma generalizada aparece con el envejecimiento normal de las personas y depende de varios factores, entre ellos los fisiológicos, ambientales y sociales. Por tanto son las personas mayores quienes sufren, en mayor o menor grado, un declive cognitivo producido por el paso normal de los años.
Sin embargo, resulta curioso que sólo una parte de esta población se ve afectada por algún tipo común de demencia. La demencia puede ser producida por múltiples causas y se manifiesta a través de un conjunto de síntomas de tipo cognitivo como puede ser confusión mental, pérdida de memoria, dificultades para resolver problemas, desorientación, alteraciones del lenguaje o síntomas conductuales como agresividad o deambulación.
La prevalencia de esta patología aumenta con la edad, y es entre los 65 y los 90 años cuando la probabilidad se multiplica (con la edad avanzada). En este contexto, la rehabilitación cognitiva, basada en programas de intervención para recuperación y fortalecimiento de las funciones ejecutivas clave como la memoria, la concentración, la atención sostenida o la velocidad de procesamiento, es primordial.
En la actualidad todo ese conjunto de recursos necesarios para la mejora de las personas mayores, y no tan mayores, afectadas por el deterioro cognitivo en alguna de sus manifestaciones es tratado de forma integral en los denominados Centro de Día. Este recurso se manifiesta como unos servicios fundamentales para la mejora de la vida de estas personas. En los Centros de Día encontrarás profesionales que ayudan a promover en los mayores un envejecimiento activo y unos hábitos de vida más saludables, teniendo en cuenta las distintas particularidades de cada uno, se presentan como el apoyo necesario para mantener un nivel de vida mejor.
¿Qué son los Centros de Día para las personas mayores?
Son lugares especializados que ofrecen, durante el día, una atención integral e individualizada a personas mayores, a menudo con algún grado de dependencia, ya sea de tipo físico o psicosocial. El objetivo de los Centros de Día es mejorar o mantener el grado de autonomía de la persona mayor, ayudándola a disfrutar de su tiempo libre y, a su vez, ofrecer un apoyo a la familia o los cuidadores que la atienden.
Cuáles son las ventajas de acudir al centro de día para la persona mayor.
Si la familia trabaja y no se puede ocupar todo el día, es mejor que la persona pueda hablar y relacionarse con otras personas, que esté activa y no que pase todo el día sola sentada ante la televisión. Las ventajas para la persona mayor son muchas:
- No está sola. Los Centros de Día son un lugar donde las personas mayores crean vínculos y relaciones sociales de amistad con personas de su edad. Esto tiene mucha importancia en la prevención del deterioro cognitivo, en su estado anímico y en su calidad de vida.
- Se mantiene más activa. En los Centros de Día se trabaja la motricidad, la capacidad cognitiva y la psicoestimulación, a través de diversas actividades: talleres de memoria, de terapia ocupacional, etc… Esto les ayuda a mantener cierto nivel de independencia.
- Se encuentra en un entorno seguro. El Centro de Día es también un ambiente seguro y agradable en el que las personas mayores pueden pasar el día.
- Está rodeada de profesionales que van llevando a cabo un seguimiento de su evolución. De esta manera es más fácil detectar cualquier anomalía en su comportamiento que pueda ser el indicio de una nueva enfermedad, de deterioro físico, etc…
- Duerme en casa. Los Centros de Día son la solución ideal para las personas que quieren seguir viviendo en su hogar sin renunciar a las actividades terapéuticas que se realizan en los centros residenciales. Por la noche, las personas mayores vuelven a su domicilio y, de esta manera, continúan integradas y vinculadas a su entorno familiar y social.
Cuáles son las ventajas para el cuidador / cuidadora o la familia
- Descanso para el cuidador. A menudo, cuidar de una persona mayor no es fácil, especialmente cuando requiere atención las veinticuatro horas del día. Esto se agrava en casos como los enfermos de Alzheimer. Existen estudios que ponen de manifiesto que el porcentaje de familias desestructuradas es más elevado entre los familiares de este tipo de enfermos lo que pone en evidencia lo que representa vivir con este tipo de situaciones. En casos así los Centros de Día son muy beneficiosos, pero es muy importante acudir a este recurso antes de que el cuidador caiga en la depresión o se agote físicamente.
- Higiene personal. Los Centros de Día suelen contar con este servicio, que facilita el mantenimiento de los hábitos de higiene para las personas mayores, especialmente para aquellas que tienen cierto grado de dependencia y que no cuentan con una vivienda suficientemente adaptada. La higiene es muy importante para evitar ciertas enfermedades, también es fundamental para la autoestima y la autovaloración de las personas mayores, que en algunos casos pueden llegar a sentir que su cuerpo es un enemigo.
Servicios que ofrecen los Centros de Día
Habitualmente, los servicios que ofrecen los Centros de Día son:
- Acogida y convivencia.
- Comidas (comida y merienda) adaptadas a dietas especiales.
- Higiene personal.
- Terapia ocupacional y recuperación de los hábitos de autonomía.
- Fisioterapia y/o enfermería.
- Seguimiento y prevención de las alteraciones de la salud.
- Estimulación cognitiva.
- Musicoterapia.
- Dinamización sociocultural y actividades de ocio.
- Apoyo personal, social y familiar.
- Según el carácter del centro, algunos ofrecen también atención espiritual y religiosa.
- También suele haber algunos servicios opcionales: transporte, peluquería, podología…
A la hora de decidirnos por un Centro de Día u otro cuentan, además, factores como la proximidad, los servicios que ofrece, el trato, etc… También hay que asegurarse de que se trate de un centro perfectamente homologado.
Además, otra de las ventajas es que, al ser un centro diurno, sabes que después de las actividades regresarás a tu casa. Los horarios suelen ser de lunes a viernes, y en algunos hasta los sábados. Con el tiempo los asistentes suelen hacerse sus grupos de amigos, por lo que es muy segura la motivación para no querer perderse un día sin ir.